Desde hace varios años todos estamos acostumbrados a escuchar que peligran nuestras futuras pensiones. Esto es así, porque el gasto en pensiones aumenta cada año debido a la mayor longevidad de nuestra población, el elevado peso de la deuda y el gasto por desempleo. Por estos motivos el actual sistema de pensiones nos anima cada vez en una mayor medida a inclinarnos por el ahorro privado como complemento para conseguir en nuestra jubilación un nivel de renta digno.
Es por ello por lo que a continuación vamos a describir en que consiste y las características fiscales de los planes de pensiones.
¿Qué es un plan de pensiones?
El plan de pensiones es un producto financiero de ahorro que se constituye con el fin de cubrir las contingencias de jubilación, fallecimiento, incapacidad y dependencia. Consiste en ir haciendo aportaciones de manera periódica durante un determinado tiempo hasta que se realiza el desembolso total o parcial.
¿Cuándo puedo rescatar el plan de pensiones?
Como norma general el plan de pensiones no se puede recuperar hasta que no se llegue a la edad de jubilación. Salvo las siguientes excepciones:
- Fallecimiento
- Enfermedad grave
- Desempleo de larga duración
¿Cómo puedo recibir el reintegro del plan de pensiones?
El plan de pensiones se puede rembolsar de las siguientes formas:
- En forma de renta, periódicamente recibimos una cantidad determinada.
- En forma de capital, se cobra en un único pago.
- En forma mixta, es la combinación de las dos formas anteriores.
¿Cuál es el beneficio fiscal de las aportaciones a un plan de pensiones?
Las aportaciones realizadas a un plan de pensiones disminuyen la base imponible del Impuesto de la Renta de las Personas Físicas y por tanto Hacienda nos permite reducir la carga impositiva que tiene que soportar el contribuyente al realizar su declaración de la renta.
La reducción por las aportaciones a un plan de pensiones tiene los siguientes límites: la cantidad menor de las dos siguientes:
- Aportaciones hasta el importe de 8000 euros.
- El 30% de los rendimientos netos del trabajo y actividades económicas.
Lo que se consigue con este beneficio es un diferimiento de la tributación hasta el año en el que se practique el reembolso del plan de pensiones.
¿Cómo tributa el reembolso del plan de pensiones?
El importe del rescate del plan de pensiones se considera como rendimiento del trabajo y por tanto aumenta la base imponible del IRPF, teniendo como consecuencia una mayor cantidad impositiva a pagar. La carga impositiva dependerá del tramo en el que se encuentre el obligado tributario.
Es importante señalar que existe un régimen transitorio en el que se da la posibilidad de aplicar una reducción del 40% sobre el reembolso en forma de capital del plan de pensiones, pero para las aportaciones realizadas antes del 1 de enero de 2007.
Hay que destacar que la reforma de la Ley de IRPF incluyó una condición temporal a la aplicación de esta reducción, estableciendo un período máximo de cobro de la prestación en forma de capital. Estos periodos son los siguientes:
- Para contingencias acaecidas hasta el 31 de diciembre de 2010: hasta el 31 de diciembre de 2018.
- Para contingencias acaecidas entre 1 de enero de 2011 y 31 de diciembre de 2014: en el año de acaecimiento de la contingencia y los ocho ejercicios siguientes.
- Para contingencias acaecidas a partir de 1 de enero de 2015: en el ejercicio de acaecimiento de la contingencia y en los dos siguientes.